Nieto del gran Federico Barbarroja, Federico II nació en medio de un mundo complejo, en donde el espíritu de las cruzadas estaba aún muy vivo.
Fue un hombre excéntrico, con una personalidad diferente al resto, amante del conocimiento, diplomático y heterodoxo que rompió continuamente las reglas del juego político de su tiempo y llevó al límite sus relaciones con el papado. En esta charla conoceremos más sobre la extraordinaria vida del emperador que ha sido conocido como Stupor Mundi, el asombro del mundo.